Jordi Amat, central del Rayo Vallecano y autor de dos tantos en la derrota de su equipo frente al Valladolid (1-2), uno de ellos en propia puerta, dijo que es "un orgullo" haber podido marcar el gol seiscientos del equipo madrileño en Primera, aunque reconoció que fue "una pena" que no sirviera para ganar.
"Fue un partido muy complicado, puesto que el Valladolid hizo un planteamiento con el que nos costó mucho llegar. En la segunda parte tuvimos dos errores, ellos los aprovecharon y nosotros no encontramos la manera de hacerles daño. Perdimos y ahora hay que seguir, nadie nos dijo que esto iba a ser fácil", dijo Amat en una entrevista a la web oficial del club.
El futbolista catalán marcó ayer su primer gol en la máxima categoría frente al Valladolid, con un disparo desde casi cuarenta metros que sirvió para igualar momentáneamente la contienda.
ORGULLOSO
"En mi gol da la casualidad que me fijo varias veces que Dani Hernández, el portero del Valladolid, está adelantado y pensé en intentarlo. Lo hice y salió muy bien, pero es una pena que no valiera al equipo para sumar", comentó.
"Personalmente es muy bonito y un orgullo marcar el gol seiscientos del Rayo en Primera y además el primero mío en esta división. La verdad que muy contento por ello porque ya era hora que entrara", manifestó el jugador, que aseguró que su equipo ya tiene la mente puesta en su visita del sábado a La Coruña.
"El de Riazor, frente al Deportivo, será un partido muy difícil. Ellos se juegan la vida, pero nosotros más. Queremos estar arriba y lo vamos a intentar desde el primer minuto", apuntó.
