Villacís cree que el partidismo del PSOE mancha la decisión de no cambiar de fase

Begoña Villacís
Begoña Villacís |EFE

La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, ha acusado al PSOE de no actuar como un equipo de Gobierno sino "de forma partidista" y considera que esta actitud "arroja cierta mancha" en la decisión de que la Comunidad de Madrid no pase a la fase 1 de la desescalada.

La concejal de Ciudadanos considera "sorprendente" que quien primero comunicase públicamente la decisión fuese la portavoz del PSOE, Adriana Lastra.

"Eso dice mucho y es muy elocuente de cómo maniobra el PSOE, no está maniobrando como un equipo de Gobierno, que es como deberían, sino de una forma totalmente partidista y eso ya arroja cierta marcha sobre la decisión que hayan tomado", ha afirmado Villacís ante los periodistas durante la celebración del Día de Europa en el Ayuntamiento de Madrid.

La vicealcaldesa de Madrid ha agregado que respeta la permanencia de Madrid en la fase 0 pero ha reiterado que "Madrid estaría preparada para afrontar una fase 1 con mucha precaución y con mucha cautela", como a su juicio se está afrontando la etapa actual.

Villacís, que ha defendido que Madrid "ha sido siempre muy responsable" y que confinaron antes que el Gobierno, ha pedido que el Ejecutivo valore los "méritos" de la capital y de la región "por controlar esta pandemia" y que "en ningún caso esto se convierta en una lucha partidista".

También ha recordado que mientras que muchas ciudades abrieron todos sus parques en la fase 0 Madrid no lo ha hecho porque es "responsable". En la capital están abiertos desde ayer los parques de los barrios pero permanecen clausuradas las grandes zonas verdes.

"Que dejen de pensar en el PSOE y en el juego político que quieren hacer, está en juego la vida de muchas personas y sobre todo también la economía de muchas personas", ha recalcado Villacís.

El Ministerio de Sanidad rechazó ayer el paso de Madrid a la fase 1, reclamada por el Gobierno autonómico. La Comunidad de Madrid defendió este paso pese a que la directora general de Salud Pública Yolanda Fuentes lo desaconsejó antes de dimitir, aludiendo a la congestión de las UCIS, la falta de equipos de protección o un personal insuficiente en atención primaria.