El Carlos III hará nuevas oleadas en otoño y primavera del estudio de seroprevalencia

  • Realizará una nueva ronda en octubre, con los mismos participantes y se repetirá cada tres meses, a principios de febrero y en el mes de mayo próximos
Raquel Yotti
Raquel Yotti |EFE

El estudio nacional epidemiológico realizado para conocer la incidencia real del Covid-19 en la población española realizará nuevas oleadas en otoño y primavera, según ha informado la directora del Instituto de Salud Carlos III, Raquel Yotti, en un coloquio celebrado en la Fundación Ramón Areces con el lema 'Estudio Nacional Epidemiológico Covid-19. ¿Qué hemos aprendido de los datos?'.

"Vamos a continuar monitorizando la pandemia. Hay muchos indicadores que se van a seguir utilizando. El Centro Europeo de Control de Enfermedades ha incluido el indicador de seroprevalencia como uno de los recomendados para conocer la evolución del Covid-19. Teniendo en cuenta toda la información recabada en las tres primeras oleadas del Estudio Nacional Epidemiológico, estamos trabajando ya en la siguiente. Es algo que nos falta por consensuar, pero ya está sobre la mesa la idea de realizar una nueva ronda en otoño, en octubre, con los mismos participantes y repetirla cada tres meses, a principios de febrero y en el mes de mayo próximos", ha dicho.

Esa previsión a largo plazo, prosigue, permitiría trabajar con una infraestructura montada aprovechando la experiencia y seguir avanzando en esa logística tan compleja. "También podríamos añadir rondas adicionales en caso de necesidad, pero ya sobre una planificación. Para seguir avanzando, es necesario trabajar con todos los recursos necesarios", ha apostillado Yotti.

Los resultados del Estudio Nacional Epidemiológico han concluido que el cinco por ciento de la población española ha tenido contacto con el Covid-19 y ha desarrollado anticuerpos contra él. El trabajo, que ha realizado más de 200.000 pruebas diagnósticas a 60.000 ciudadanos elegidos al azar entre menores de un año a nonagenarios en tres oleadas distintas, ha implicado a 5.000 profesionales sanitarios de 2.400 ubicaciones distintas de todas las comunidades autónomas y a 29 laboratorios.

"Ha sido como fabricar el avión en pleno vuelo porque no existía el 'software' que permitiera todo lo que queríamos hacer y además con unos datos especialmente protegidos", ha comentado el subdirector General de Tecnologías de la Información del Ministerio de Sanidad, Juan Fernando Muñoz Montalvo. Además, ha valorado también la cooperación en todo el Sistema Nacional de Salud, al tiempo que ha reconocido el papel clave que ha asumido la Enfermería y el resto de profesionales sanitarios.

Por su parte, la directora del Centro Nacional de Epidemiología, Marina Pollán, encargada de diseñar el estudio, ha reconocido que sabían desde el principio que iba a ser complicado. El estudio ha demostrado la eficacia del confinamiento al detectar que en la primera oleada muchas personas daban positivo y en la segunda o tercera ya no", ha recalcado.

"También hemos detectado cómo cambiaba la seroprevalencia dependiendo de los síntomas que iban apareciendo. Del estudio de los datos en las tres oleadas comprobamos que el virus sigue ahí y que es importante continuar con las medidas de protección", ha apostillado Pollán.

"Era necesario ese confinamiento duro. Sabiendo que solo el cinco por ciento de la población ha tenido contacto con el virus, conocemos también la mortalidad que ha provocado ese cinco por ciento. Para el momento actual, sus conclusiones nos animan a mantener esas medidas de prudencia. También nos sirve para estar seguros de que lo que hacemos está basado en datos y sobre algo real, medido, no se trata de una estimación. Porque las estimaciones nos pueden llevar a tomar decisiones que no son correctas", ha concluido Yotti.